Paro virtual

Me pongo a pensar en como eran los paros cuando era pibe. Los noventa del neoliberalismo privatizador. En esa época los reclamos eran distintos, es importante para mí poner en palabras imágenes que me quedaron grabadas. Momentos que tienen aroma, peso, forma y están bañados de tristezas. Las bolsas de merca salían mas baratas que un Big Mac. Era la época en la que se decía egresados 2002, desocupados 2003. Cada vez que había un paro se olía el miedo, la bronca social, el descontento general.

Ahora vienen a decir que el movimiento obrero está representado solamente por la CGT. Ahora el proyecto nacional no quiere a los trabajadores. Justo después de una elección democrática contundente como la de 2011. Un sindicalista disfrazado de buenas convicciones nos viene a querer decir que todo está mal. Encima con la demagogia de no llamarse desestabilizador, cuando en vez de presentar una lista y salir a jugarla, a medirse en la cancha de los votos que es donde se legitima la política. Parece mentira que no se recuerde la ambición de presidencia de este hombre, parece mentira que se saque una foto con Scioli dos semanas antes, parece mentira que Scioli tenga la economía de la provincia como la lleva, parece mentira que siempre aparezca en cada tragedia producida por la delincuencia, y que en vez de brindar soluciones se ponga en espectador de las desgracias, contando a la gente lo mal que está la inseguridad que él no combate. El gobernador de la provincia de Buenos Aires aparece en representación del estado. ¿Dónde estaba el estado en el  momento de la tragedia, en la prevención? ¿Por qué nunca fue removido de su cargo el ministro de justicia y seguridad, el señor Casal?

Capaz que a vos que lees esto no te importe, pero para algunos de los que somos del conurbano nos resulta fundamental que nuestros representantes nos hablen de política y de como transformar la realidad que nos toca.  Estoy cansado que me hablen de política desde una postura de ex deportista o cronista que no termina de comprometerse con la situación.

Ayer a la noche me quedé leyendo esto: http://juventudsindical.com/2012/06/27/3-analisis-de-coyuntura/. En todo momento el texto intenta remarcar el aspecto legal de su lucha, hablan de constitución y después dicen ¨No hay conflicto social que se pueda resolver con el Código Penal en la mano”. Seamos claros, esta gente quiere formar parte en las decisiones que por haber ganado los votos le toca al poder ejecutivo, vivimos en un sistema presidencialista, pero poco les importa a ellos y comienzan a criticar todo de una forma arbitraria y totalitaria. Hasta se hacen llamar ¨El movimiento obrero¨, siempre totalitarios a la hora de generar su discurso de autobombo. Pero a la hora de los votos no, a la hora de los votos el gps les dice “recalculando” y no quieren pasar vergüenza. En este texto también hablan con un desmesurado odio hacia el modelo, primero se alinean y se desalinean, luego seducen y comienzan a exigir poder que no les corresponde, el entrar en negociaciones que no les pertenecen, sin duda debe ser un problema enorme sentarse a dialogar con gente que se viste de obrero pero que persigue ambición de un cargo político sin merito del sufragio.

Ayer fue el aniversario del asesinato de Darío y Maxi. Les voy a dejar este link: http://www.prensadefrente.org/pdfb2/index.php/fot/2006/06/18/p1676. La foto del principal Quevedo sonriente mientras Maxi agoniza.
Yo tenía 14 años cuando el país estaba lleno de paros, cuando se estaba prendiendo fuego, cuando todo era gris. Los pibes de mi generación tenemos nuestros muertos, estamos cubiertos de sangre de nuestra última crisis, tenemos latentes los saqueos.  Por eso en estas fechas de oportunismos es bueno siempre tener memoria.

¿O nos vamos a creer que una huelga obrera está bancada por la sociedad rural, el peronismo federal y TN?